top of page

© 2023 by Johan Cage. All rights reserved.

Numeros

Capitulo 16

 

 

 

1. Coré, hijo de Isar, hijo de Quehat, hijo de Leví y también Datán y Abirón, hijos de Eliab, y On, hijo de Pelet, de la tribu de Rubén,

2. se rebelaron contra Moisés. Les siguieron doscientos cincuenta israelitas, todos jefes de la comunidad, miembros del consejo y personajes conocidos.

3. Se amotinaron contra Moisés y Aarón y dijeron: "Basta ya, ¿acaso no están consagrados todos los miembros de la comunidad? ¿Y no está Yavé en medio de nosotros? ¿ Por qué entonces se creen ustedes superiores a la comunidad de Yavé?

4. Al oír eso, Moisés se echó de bruces al suelo.

5. Luego, dirigiéndose a Coré y a toda su banda, les dijo: "Mañana temprano Yavé dará a conocer quién es suyo y quién le está consagrado y puede acercarse a él. El mismo hará que se aproxime el que eligió.

6. Así que mañana tomen sus incensarios, tú Coré y toda tu banda; y al llegar ante Yavé les pondrán fuego y luego les echarán incienso. Aquel a quien Yavé designe, ése será el consagrado. ¡Se han pasado, hijos de Leví!

8. Moisés le dijo a Coré: "¡Oigen bien, hijos de Leví!

9. ¿Les parece poco que el Dios de Israel los haya separado de la comunidad de los israelitas, y que los haya hecho acercarse a El para que sirvan en la Morada de Yavé y así aseguren el culto en nombre de la comunidad? Les permitió que se le acercaran a ti y a tus hermanos, los hijos de Leví, y ¿todavía reclaman el sacerdocio? Esto es el colmo, pues tú y tu banda se han amotinado contra Yavé. Y Aarón, ¿qué tienen en su contra para que murmuren de él?

12. Moisés mandó buscar a Datán y Abirón, hijos de Eliab. Pero ellos respondieron: "¡No iremos!

13. ¿Te parece poco habernos sacado de una tiera que manaba leche y miel para hacernos morir en este desierto? ¿Y tú quieres hacer de jefe?

14. ¿Piensas que nos trajiste a una tierra que mana leche y miel? ¡Si ni siquiera nos has dado campos ni viñas! ¿Crees que toda esa gente está ciega? ¡No iremos, pues!" Moisés se enojó mucho y dijo a Yavé: "No mires su ofrenda, no les he quitado nada, ni siquiera un burro, ni les he hecho daño a ninguno de ellos".

16. Moisés dijo a Coré: "Tú y toda tu banda preséntense mañana ante Yavé, junto con Aarón.

17. Que cada uno tome su incensario y le ponga incienso, luego cada uno hará sus incensaciones en presencia de Yavé (¡doscientos cincuenta incensarios!). Tú y Aarón tendrán cada uno su incensario".

18. Tomó pues cada uno su incensario, le puso fuego e incienso y se presentó a la entrada de la Tienda de las Citas, junto con Moisés y Aarón.

19. Como Coré sublevara a toda la comunidad contra ellos a la entrada de la Tienda de las Citas, se manifestó la Gloria de Yavé a toda la comunidad.

20. Entonces dijo Yavé a Moisés y Aarón: "Apártense de esta comunidad porque la voy a exterminar en todo el campamento.

22. Ellos se pusieron con el rostro en tierra y dijeron: "¡Oh Dios, Dios de los espíritus de todos los hombres! Si un solo hombre ha pecado, ¿vas a enojarte con toda la comunidad?"

23. Yavé le respondió a Moisés:

24. Díganle a la comunidad que se aleje de las tiendas de Coré, Datán y Abirón".

25. Moisés fue entonces donde Datán y Abirón; los ancianos de Israel lo siguieron.

26. Se dirigió a la comunidad: "¡Apártense de las tiendas de esos hombres perversos! No toquen nada de lo que les pertenece, porque si no van a morir debido a sus pecados".

27. Se apartaron entonces (de las tiendas de Coré, Datán y Abirón;) mientras tanto Datán y Abirón habían salido a la entrada de su tienda junto con sus mujeres, sus hijos y sus pequeñuelos.

28. Moisés dijo: "Ahora sabrán que Yavé me envió para que realice todos esos prodigios y que eso no viene de mí.

29. Si esos hombres mueren de muerte natural y corren la misma suerte que cualquiera, es señal de que Yavé no me envió.

30. Pero si Yavé hace un milagro, si la tierra se abre en un gran tramo para tragárselos junto con todo lo que tienen, si descienden vivos al Lugar de los muertos, entonces sabrán que esos hombres despreciaron a Yavé".

31. Aún no terminaba de hablar, cuando la tierra se abrió a sus pies.

32. Se abrió una garganta y se los tragó con toda su familia ( a todos los hombres de la banda de Coré) junto con todo lo que les pertenecía.

33. Bajaron vivos al Lugar de los muertos, junto con todos los que estaban con ellos. La tierra los tapó y desaparecieron de la vista de la comunidad.

34. Todos los israelitas que estaban en los alrededores salieron huyendo y decían: "¡No vaya a tragarnos también la tierra!"

35. Entonces brotó un fuego de Dios que devoró a los doscientos cincuenta hombres que ofrecían el incienso.

 

Capitulo 18

 

 

 

1. Yavé dijo a Aarón: "Tú, tus hijos y tu tribu contigo, serán responsables del santuario. Tú y tus hijos contigo, tendrán la responsabilidad del sacerdocio.

2. También harás que participen en el culto los Levitas: son tus hermanos, de la tribu de tu padre. Te ayudarán y te asistirán cuando tú y tus hijos tengan que servir en la Tienda del Testimonio.

3. Serán socios de ustedes en todo el servicio de la Tienda, pero no se aproximarán a los objetos sagrados, ni al altar, pues de lo contrario será la muerte para ellos y ustedes.

4. Los acompañarán a ustedes en el servicio de la Tienda de las Citas, en todo lo que concierne al servicio de la Tienda, pero ningún profano se unirá a ustedes.

5. Ustedes asegurarán el servicio del santuario y el del altar. De ese modo no se desencadenará sobre los israelitas la cólera de Dios.

6. Yo mismo escogí a sus hermanos los Levitas de en medio de los israelitas para dárselos. Son donados de Dios para servir en la Tienda de las Citas. Tú, y tus hijos contigo, desempeñarán su ministerio en todo lo que se refiere al altar y a lo que pasa detrás de la cortina. Ustedes asegurarán su servicio y ese sacerdocio es un don que les hago; el extraño que quisiere meterse en eso, morirá".

8. Yavé dijo a Aarón: "Te doy la parte que se reserva para mí de todas las ofrendas de los Israelitas. Te la doy debido a la consagración que recibieron tú y tus hijos: es una ley perpetua.

9. Esto es lo que te corresponderá de todo lo que se ofrece o se consagra: todas las ofrendas, es decir, todas las oblaciones, todos los sacrificios por el pecado y todos los sacrificios de reparación que se ofrezcan, todo eso será cosa santísima y será para ti y para tus hijos.

10. Lo comerás en un lugar santísimo. Cualquier varón lo podrá comer; la considerarás como una cosa santa.

11. Tuyo será también lo que se reserva de las ofrendas de los israelitas, de cualquier ofrenda mecida; te lo doy a ti, a tus hijos y a tus hijas como ley perpetua. Cualquiera que esté puro en tu casa, lo podrá comer.

12. Te doy además las primicias que los Israelitas presentan a Yavé, lo mejor del aceite, del vino nuevo y del trigo.

13. Te doy los primeros productos de la tierra que ellos lleven a Yavé. Cualquiera que esté puro en tu casa los podrá comer.

14. Todo lo que esté consagrado por anatema en Israel será para ti.

15. Te pertenecerá el primogénito de cualquier ser viviente, sea de hombre o de animal, ofrecido a Yavé. Tú harás solamente el rescate del primogénito de hombre, así como del primerizo de un animal impuro.

16. El rescate se hará a partir de un mes de edad, lo estimarás en cinco siclos de plata calculados según el siclo del Santuario, es decir veinte gueras.

17. Pero no harás el rescate del primerizo de vaca, de oveja ni de cabra, porque están consagrados. Derramarás más bien su sangre sobre el altar, y harás quemar su grasa como sacrificio por el fuego de agradable aroma para Yavé.

18. Para ti será su carne como asimismo el pecho que se haya mecido y la espaldilla derecha.

19. Todo lo que se haya reservado de las ofrendas que hagan los Israelitas a Yavé será considerado como partes santas; te las doy a ti, a tus hijos y a tus hijas: es una ley perpetua. Es una alianza eterna por la sal ante Yavé para ti y para toda tu descendencia contigo".

20. Yavé dijo además a Aarón: Tú no tendrás territorio alguno en el país ni habrá parte alguna para ti en medio de tu pueblo. Porque yo mismo soy tu parte y tu heredad en medio de los Israelitas.

21. A los hijos de Leví les doy como herencia todos los diezmos de Israel, a cambio del servicio que presten, es decir, del servicio de la Tienda de las Citas.

22. Los Israelitas no se acercarán a la Tienda so pena de cometer una falta grave.

23. Los levitas son quienes asegurarán el servicio de la Tienda de las Citas y cargarán con la falta si existiese: es una regla perpetua de generación en generación. Por eso no tendrán heredad entre los Israelitas.

24. El diezmo que los israelitas separan en honor de Yavé, se los doy a los Levitas como parte de su herencia. Por eso les he dicho que no tendrán heredad entre los Israelitas.

25. Yavé dijo a Moisés:

26. Transmitirás esto a los Levitas: Cuando perciban de los Israelitas el diezmo que les otorgo en herencia, reservarán una parte para Yavé: será el diezmo del diezmo.

27. Esa parte que ustedes reservarán, les será contada como se cuenta el trigo en la era o el vino en la cuba.

28. Así pues reservarán una ofrenda para Yavé de todos los diezmos que reciban de los Israelitas y entregarán esa parte al sacerdote Aarón.

29. De todos los dones que reciban reservarán una parte para Yavé, que será lo mejor de todo lo consagrado.

30. Les dirás además: Cuando ustedes aparten lo mejor, el resto del diezmo será para los Levitas como el trigo en la era o como el vino en la cuba.

31. Pondrán comérselo en cualquier parte, ustedes y su familias: es su salario por el servicio que prestarán en la Tienda de las Citas.

32. Si han apartado lo mejor, no cometerán por ello ningún pecado. Cuiden pues de no profanar las ofrendas santas de los Israelitas y no morirán".


 

Capitulo 17

 

 

 

1. Yavé dijo a Moisés:

2. "Comunícale esto al sacerdote Eleazar, hijo de Aarón: Saca los incensarios de entre las cenizas y arroja lejos el fuego que había en ellos, porque están consagrados.

3. Los incensarios de esos hombres que pecaron y que murieron te servirán para hacer las placas para revestir el altar. Esos incensarios son santos porque estuvieron en contacto con Yavé. Serán una señal para los israelitas".

4. El sacerdote Eleazar tomó entonces los incensaios de cobre que pertenecieron a los que habían sido quemados e hizo con ellos placas para revestir el altar.

5. Allí están para recordarles a los israelitas que cualquiera que no pertenezca a la raza de Aarón no puede acercarse para hacer incensaciones a Yavé. De lo contrario, correrá la misma suerte que Coré y su banda a los que Yavé se lo había advertido por medio de Moisés.

6. Al día siguiente, toda la comunidad de los israelitas se puso a murmurar contra Moisés y Aarón: "¡Ustedes, decían, son los que han dado muerte al pueblo de Yavé!"

7. Mientras la comunidad se amotinaba contra Moisés y Aarón, estos se dirigieron a la Tienda de las Citas: la nube la había cubierto y apareció la Gloria de Yavé.

8. Entonces Moisés y Aarón se acercaron a la Tienda

9. y Yavé le dijo a Moisés:

10. "¡Retírate de en medio de esta comunidad, porque la voy a exterminar en el campamento!". Ellos cayeron con el rostro en tierra.

11. Moisés le dijo entonces a Aarón: "Toma tu incensario, pon en él fuego del altar, échale luego incienso y corre hacia la comunidad con tu incensario. Harás la expiación por ellos, porque se ha desencadenado la cólera de Yavé y ha comenzado el castigo.

12. Aarón hizo como Moisés se lo había dicho, y corrió hacia la comunidad. El flagelo ya estaba azotando al pueblo. Aarón puso el incienso e hizo la expiación por el pueblo;

13. se paró en medio de los muertos y de los vivos, y el flagelo se detuvo.

14. Los que murieron víctimas del castigo llegaron a la cifra de catorce mil setecientos, sin contar a los que habían muerto por culpa de Coré.

15. Cuando Aarón volvió donde Moisés, a la entrada de la Tienda de las Citas, el flagelo había cesado.

16. Yavé dijo a Moisés:

17. "Diles a los Israelitas que te traigan una varilla por tribu, una varilla por cada uno de los jefes de tribu. Serán pues doce varillas; y tú escribirás en la varilla respectiva el nombre de cada uno.

18. En la varilla de Leví escribirás el nombre de Aarón, porque sólo habrá una varilla por tribu.

19. Las depositarás en la Tienda delante del Testimonio, allí donde los cito a ustedes,

20. y aquel cuya varila florezca, ese será el que he elegido. Así acabaré con todas esas quejas de los israelitas contra mí -me refiero a las quejas contra ustedes".

21. Moisés transmitió esas palabras a los israelitas y cada uno de los jefes le dio una varilla. Cada tribu tenía su varilla, que era llevada por su jefe, o sea, en total doce varillas. La varilla de Aarón estaba junto con las demás.

22. Moisés depositó esas varillas delante de Yavé en la Tienda del Testimonio.

23. Al día siguiente, cuando Moisés entró en la Tienda del Testimonio, la varilla de la tribu de Leví presentada por Aarón había florecido: le habían aparecido yemas, había botones de flores y las almendras habían madurado.

24. Moisés retiró entonces todas las demás varillas de la presencia de Yavé y se las mostró a los israelitas. Estos las vieron y cada uno recogió la suya.

25. Yavé dijo entonces a Moisés: "Vuelve a poner la varilla de Aarón delante del Testimonio; allí permanecerá como una advertencia para los rebeldes. Así alejarás de mí sus murmuraciones y no morirán".

26. Moisés hizo como Yavé se lo había ordenado.

27. Los israelitas le dijeron a Moisés: "¡Nos morimos, estamos perdidos! Nos estamos muriendo todos!

28. Porque cualquiera que se acerque a la Morada de Yave muere. ¿Vamos pues a perecer todos así?


 

bottom of page